El Pony Express fue el más rápido servicio de mensajería y correos que tuvo la Unión Americana en el siglo XIX. Su recorrido cubría gran parte de los territorios de la unión, desde San José en Missouri hasta Sacramento en California, para lo cual debía cruzar las Grandes Llanuras, las Montañas Rocosas y la Sierra Nevada. Pero... ¿cómo lograron hacerlo? Pues solamente a galope de caballo y con un grupo de selectos jinetes que se turnaban la posta. Aquí tienes su maravillosa la historia.
Hasta mediados del siglo XIX, la correspondencia en los Estados Unidos era entregada a través de las diligencias, que más que nada se hicieron famosas por ser el botín preferido de maleantes y forajidos del lejano y salvaje oeste.
Unir las dos costas de los Estados Unidos mediante un sistema de mensajería rápido y seguro, siempre fue un sueño para los primeros colonos ya que las noticias y mensajes que debían llegar generalmente desde la Costa Este hacia el recién explorado y salvaje Oeste, demoraban una eternidad en llegar, en caso de que llegaran.
Asi por ejemplo, en 1845, un mensaje del entonces presidente James K. Polk tardó seis meses en llegar al Oeste, ya que en aquella época el correo también se enviaba por vía marítima, bordeando América del Sur hasta la Tierra del fuego, y posteriormente atravesando el Canal de Panamá.
En 1860 se creó una ruta terrestre más rápida que iba desde San Luis (Missouri), hasta El Paso, Texas, que tardaba aproximadamente 25 días y varias empresas de diligencias y ferrocarriles decidieron incursionar en el negocio de correos y mensajería, pero era una época difícil porque en todo lado los ánimos se encontraban caldeados antes de la Guerra Civil y en muchos sitios fueron destruidos sus vagones.
Fue entonces cuando el visionario William Russell junto a dos socios creó una empresa llamada Central Overland California & Pikes Peak Express Co. y anunció su nuevo servicio postal rápido de ponis entre St. Joseph, Missouri y Sacramento, California, que cruzaría 3200 km a través de varias de las zonas más salvajes del territorio estadounidense, y lo mejor de todo es que ofrecía entregar la correspondencia en 240 horas (10 días). Para esto contrataron 50 jinetes y adquirieron más de 400 caballos. De esta forma, el famoso Pony Express iniciaba sus labores el 3 de abril de 1860.
Las estaciones del Pony Express estaban separadas a 16 km una de otra (aprox) a lo largo de todo el recorrido, que es la distancia aproximada que un caballo puede recorrer a galope normal. El jinete cambiaba de caballo en cada estación y seguía con su trayecto.
La mochila con la correspondencia pesaba alrededor de 75 kilogramos y se llevaba en la grupa del caballo, donde se sostenía bajo el peso del jinete. Los jinetes, que no podían pesar más de 56 kg, eran reemplazados cada ocho o diez estaciones, es decir que un jinete recorría diariamente entre 120 y 160 km.
Había 184 estaciones a lo largo del recorrido, las cuales generalmente se ubicaban en fuertes militares, mientras que otras se construyeron para el efecto.
Los caballos que fueron escogidos para recorrer este trayecto, medían aproximadamente 1,47 m de altura y pesaban alrededor de 400 kg, por eso el nombre de Pony Express
Gracias a su capacidad para trotar a altas velocidades, el caballo Morgan se había convertido ya en 1840 en la raza favorita para las carreras de enganche al trote. Durante la Guerra Civil americana, el caballo Morgan sirvió de montura a la caballería de ambos bandos, y también fue la montura por excelencia del servicio del Pony Express, junto al caballo Pinto y al Mustang.
Para reclutar a los jinetes idóneos, la compañía sacó un curioso anuncio en el que solicitaba jóvenes de hasta 18 años que estén dispuestos a trabajar “con el riesgo de morir a diario”, además como requisito adicional pedían que sean de contextura delgada y "preferentemente huérfanos".
Atraídos por la oportunidad de aventuras y por una excelente paga ($ 25 semanales cuando el salario normal no llegaba ni a $ 2 por semana), más habitación y comida, un gran número de jóvenes se apuntó en este proyecto. En este selecto grupo hubo hasta figuras legendarias, como "Buffalo Bill" Cody, "Pony Bob" y "Wild Bill" Hickok.
El lema de la empresa y de todos estos jinetes era "El correo debe pasar" y esto lo hacían a cualquier costo. Pese a los numerosos obstáculos, muy pocas veces dejaron de cumplir el agotador plazo de 240 horas para la entrega.
Eso si, para ingresar a trabajar como jinete de la compañía, uno de los requisitos era hacer y firmar el siguiente juramento:
"Yo .............., por este medio juro ante el Gran Dios vivo, que durante mi participación y mientras sea un empleado de Russell, Majors y Waddell, en ningún caso utilizaré lenguaje profano, no beberé licores embriagantes, no discutiré ni pelearé con ningún empleado de la empresa y que en todos los aspectos me conduciré con honestidad, seré fiel a mis deberes y correcto en todos mis actos para ganar la confianza de mis empleadores, y así Dios me ayude".
Los primeros viajes con valija de correo salieron simultáneamente el 3 de abril de 1860, desde San José en Missouri hacia la costa oeste, y desde San Francisco, California, hacia Missouri. Ambos llegaron según lo previsto -10 días después- el 14 de abril de 1860.
Apenas un mes después de su inauguración, el Pony Express tuvo su prueba más dura cuando los indios Paiutes de Nevada atacaron e incendiaron algunas estaciones y a los jinetes. En total, destruyeron 7 estaciones, se perdieron 150 caballos y murieron 16 hombres.
Pero no fueron los indios ni el riguroso clima inviernal los que pusieron fin al Pony Express año y medio después de su lanzamiento. Fue la elevada nómina y gastos de mantenimiento que se requerían para tantos jinetes y caballos, aparte del personal administrativo en las estaciones y supervisores de ruta lo que al final resultó demasiado costoso.
También se vieron afectados por la competencia de otras empresas por conseguir el contrato con el gobierno y por los conflictos entre los nativos americanos y los colonos que igual recortaron los ingresos de la compañía. Para rematar la situación, poco después de que empezaran las operaciones en su ruta, se dio el inicio de la Guerra Civil estadounidense, lo que obligó a que la línea operara intermitentemente en ciertos tramos conflictivos.
La empresa anunció su cierre el 24 de octubre de 1861, dos días después de que llegara a Salt Lake City el envío del primer telégrafo transcontinental.
El Pony Express había ganado 90.000 dólares y perdido 200.000. En 1866, tras el fin de la Guerra Civil estadounidense, Holladay vendió los derechos la rutay los establecimientos del Pony Express a Wells Fargo por un millón y medio de dólares.
A pesar de todo, el Pony Express se convirtió en una leyenda en el país del norte, donde se levantaron monumentos en su honor en Sacramento, Stateline, Reno, Salt Lake City, Colorado, Kansas y St. Joseph.
En su breve período de existencia, sus jinetes recorrieron 985.000 km, el equivalente a dar 24 vueltas alrededor de la Tierra.fuente: sentadofrentealmundo.com